Joder, yo no soy de llorar viendo estas cosas, pero este vídeo me ha tocado. Hay que ver que empuje el de este padre. Su gallardía y arrojo son de enmarcar.
La niña se llama María Ferré y tiene una extraña enfermedad llamada Síndrome de Rett, con una discapacidad del 87%. Pero eso no la impide correr maratones junto a su padre.
Si tenéis un poco de sensibilidad ved este vídeo. Por cosas como estas, aunque sean tristes, merece la pena estar vivo, pues nos colman de esperanza.
Y ya si estáis concienciados con la causa se pueden hacer donativos desde 5€ aquí. Todos podemos ayudar a empujar del carro de María. Podéis apadrinar kilómetros, como yo he hecho con el Km.15 de la prueba de bicicleta.
Para más información podéis visitar la página mimundorett.com.
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