Ogarrio, pueblo perteneciente al municipio de Ruesga, es uno de los 50 pueblos elegidos para participar en la original campaña de Aquarius, quien propone que no quede un urbanita huérfano de pueblo.
Al pueblo de Cantabria seleccionado, Aquarius lo describe
así: "Pueblito con riquísimo patrimonio natural, paisajístico y
arquitectónico lleno de iglesias, casonas blasonas, palacios, espectaculares
paisajes… Disfruta de su cocido montañés, cuevas prehistóricas, rutas de
senderismo, canoas, barrancos, etc."
A cada usuario que solicite la adopción en Ogarrio (pincha aquí),
recibirán un diploma como "hijo adoptivo de Aquarius", con el que
obtendrán múltiples beneficios tales como disfrutar de la tranquilidad y
de la bondad de sus gentes, charlando con los lugareños en la plaza, hasta
descuentos en bares, restaurantes y alojamientos que se aplicarán a todo aquel
que acuda con su diploma.
El objetivo de Aquarius es acabar con la injusticia de que
haya pueblos sin gente y gente sin pueblo, poniéndoles en contacto para que se
beneficien mutuamente. El spot de la campaña fue rodado en Uclés (Cuenca) y
está protagonizado por habitantes de la zona, representando el espíritu de los
pueblos de España. En él, se ve reflejada la tristeza, el "vacío
infinito" y la sensación de "orfandad" que siente un urbanita
por no tener un pueblo al que ir de vacaciones.
Ogarrio, nuestro representante, tiene ya 134 solicitudes (el
que más es Deva, en Asturias, con 207). Y en total, 23357 huérfanos de
pueblo esperando ser adoptados. Cuando menos, la idea es original.
Una buena forma de fomentar el turismo rural en nuestro país.
Veremos cómo funciona.
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