En casita

Se acabó lo bueno. Hace un ratito que he llegado a casa. Vaya cambio de temperatura. Salimos a las 14.35 de Málaga con 28 grados y ¡llegamos a Santander con 13! Y mañana a currar, di que ya es miércoles y se pasa rápido.

El viaje ha estado muy bien. Málaga me decepcionó un poco, yo pensé que era más bonita. Pero la verdad que no tiene nada, salvo el buen tiempo. Y Granada me ha encantado. Sabía que era bonita... ¡pero no tanto!

Salimos de Parayas el jueves a las 21.45, bueno no, a esa hora estaba previsto que despegara el avión, pero por un excesivo tráfico aéreo en Barajas se retrasó la salida unos cuarenta minutos. Así que cuando quisimos llegar a Málaga nos fue imposible coger el tren con dirección a la ciudad, por diez minutos. Por lo que tuvimos que coger un taxi que nos costó 19 euros hasta el hotel. Como iba a ser por una noche solo, pillamos un hotel baratuco. Una habitación triple en el Solymar, por 60 euros. 

La mañana del viernes la dedicamos a visitar Málaga. Vimos la Alcazaba, el "Castillo" de Gibralfaro, la Catedral y poco más, pues hacía muuucho calor y subir al Gibralfaro fue muy duro. Después unas cañitas con sus correspondientes tapas y a las 16.00 a coger el bus dirección Granada.

Cuando llegamos, una hora y media después, a la estación de Granada, allí nos estaba esperando Irene. Y con ella a ver el apartamento donde nos quedaríamos Nadia y yo, pues ellos dormían en la resi de Irene. Dejamos las cosas y a tomar unas cañitas.. ¡con sus correspondientes tapas!

También aprovechamos la tarde para hacer la compra, dormir en el apartamento con nosotros no dormían, pero comer... eso sí, ¡sobre todo Ambru! Jajajaja. Fuimos a Mercadona, que quedaba algo lejos, pero nos llevaban la compra a casa.

El sábado a las 11 nos trajeron la compra y bajamos a dar una vuelta antes de comer. Quedamos con Ambru e Irene en la Plaza de Las Pasiegas, junto a la Catedral, pero al final se retrasaron y mientras venían entramos a La Capilla Real. Por esa zona abundan las gitanas con el romero, qué triscas, aunque a una la perdono porque me llamó precioso... jaja. Paseando estuvimos por la Alcaicería, la Plaza Bib-Rambla, donde vimos como la policía se llevaba a un negro detenido por venta ambulante a la fuerza, y varios sitios más antes de subir a comer. 

Después del papeo echamos una siestuca, para coger fuerzas, pues a las 18.30 teníamos excursión por el bonito barrio de Albaicín y por la noche salíamos de fies. 

A la excursión vino con nosotros cuatro vino Ángela, la amiga de Irene, y una rusa que está de Erasmus, Ana. Y de guía, un matemático de 27 años, Antonio, que era del barrio. La visita guiada estuvo muy entretenida  pues el sitio era espectacular y Antonio de vez en cuando soltaba alguna frikada... Aunque Nadia, Ambru y yo nos marchamos antes, para ver la final de la Champions que perdió mi equipo del alma, el Manchester United... jajaja.

Cenamos, tomamos unos litros y salimos a ver el ambiente granadino. La verdad que no había mucho. Pero lo pasamos bien. Hasta nos dieron palomitas de tapa con las copas. Y las 4.00 pa' casa.

El domingo vino solo a comer Ambru. A las 15.30 teníamos otra excursión: la Alhambra. Qué decir de la Alhambra... es la leche. Y si no fuera por los "destrozos" de Carlos V, sería mucho más bonita. Estuvimos unas cuantas horas visitando todo el conjunto, incluido el Generalife. A eso de las 20.00 horas terminamos, pues a parte de que se nos acababa la visita, Antonio se marchaba, pues jugaba su Granada contra el Elche.

Para reponer fuerzas fuimos a tomar una caña a calle Elvira, aunque con un pincho que no nos gustó mucho. Y de allí otra vez al apartamento, a cenar. Vimos un ratín la tele, La que se avecina. Y pronto a la cama que estábamos muertos de tanto andar.

Ayer por la mañana nos tocó a Nadia y a mí acercarnos a la resi de Irene, en concreto al Monasterio de la Cartuja. Lo vimos a todo correr, pues llegamos poco antes de que cerraran. Antes de comer donde los "tapones" del Nido del Búho, visitamos el Hospital Real, la Puerta de Elvira y paseamos por la Avenida de la Constitución viendo las esculturas de Lorca o María la Canastera. Ojo a las tapas de ese bar... por 2,10 tubo o tinto de verano y una peazo tapa que cuando lo ves dices "¿etto qué éh lo que éh?". 

Por la tarde visitamos la Catedral y el Corral del Carbón, antes de apalancarnos en el apartamento. Cenamos lo que nos quedaba y por la noche subimos al Mirador de San Nicolás. Y a eso de las doce nos recogimos.

Y hoy día de viajes, buses, avión y coche. FIN (hasta la próxima escapadita).